Nos encargaron la renovación de la marca y el diseño interior de un exitoso restaurante mexicano de Pekín. El cliente buscaba una imagen fresca que reflejara la evolución de la marca y mejorara la experiencia gastronómica. En estrecha colaboración con su equipo, reestructuramos la distribución de la cocina para mejorar la funcionalidad y la fluidez y, a continuación, nos centramos en transformar los interiores del restaurante.
Nuestro concepto de diseño se probó primero en una nueva ubicación antes de implantarlo en el local original y más popular de Sanlitun. El reto consistía en crear un espacio versátil que pudiera pasar sin problemas de una comida informal a un ambiente vibrante por la noche, con un bar completo y cambios significativos de día. Mediante una cuidadosa selección de materiales, iluminación y mobiliario, diseñamos un entorno que captaba el espíritu enérgico y colorido de México, al tiempo que ofrecía flexibilidad en la distribución para diferentes momentos del día. El resultado fue un espacio cohesionado y acogedor que realzaba la identidad de la marca, al tiempo que resultaba práctico tanto para los clientes como para el personal.